Risco de Queda en Floripa


26 jun 25



Quienes trabajamos en turismo sabemos que cada tanto tenemos la suerte de salir de “paseíto”. Se trata de esas escapadas breves, pero muy valiosas, que nos permiten conocer destinos, hoteles y servicios con los que luego soñarán nuestros pasajeros. No hay mejor manera de recomendar un lugar que habiéndolo vivido en primera persona.

Así fue como me encontré en un rincón paradisíaco del sur de Brasil: *Florianópolis, invitada por nuestro operador de confianza *AERO* y el imponente *Costão do Santinho Resort*, uno de los complejos más completos y destacados de la región.

*Todo iba perfecto… hasta que el cuerpo dijo basta*

Durante los primeros días del viaje, la experiencia fue inmejorable: recorridos, gastronomía, paisajes de ensueño y una atención hotelera que realmente superaba expectativas.

Pero hacia el final del viaje, algo cambió. Mi cuerpo comenzó a dar señales de alerta: fiebre alta, dificultad para respirar, mucho cansancio. Ya no era solo un malestar pasajero.

Ahí es donde comenzó otra parte del viaje, una que nunca imaginé, pero que me enseñó muchísimo sobre la *importancia de estar respaldados* cuando viajamos.

## El valor real de una buena asistencia##

Desde la enfermería del resort, que funcionó con una rapidez y humanidad admirables, se pusieron en contacto con *Assist Card*, mi asistencia al viajero, que se encargó absolutamente de todo: traslados, contacto con el hospital, trámites, seguimiento… cada detalle estuvo cubierto.

Y en todo momento, estuvo *Sil*, nuestra referente de **AERO**, acompañándome con una calidez y un compromiso que exceden cualquier obligación profesional. Me sentí contenida, cuidada y, sobre todo, *no estuve sola*.

La internación se realizó en el *Hospital SOS Cárdio de Florianópolis*, donde el personal médico no solo fue altamente profesional, sino también profundamente humano. En un país distinto, con otro idioma y lejos de casa, esos gestos marcan la diferencia.

## Cuando el respaldo es parte del viaje##

Esta experiencia me reafirmó algo que siempre les repetimos a nuestros pasajeros: *viajar con asistencia no es un gasto, es una inversión*. Lo mismo con elegir operadores y agencias que estén presentes, desde el primer contacto hasta el regreso.

Agradezco profundamente a AERO, al equipo de **Costão do Santinho, a **Assist Card*, y al personal médico de SOS Cárdio. Lo que pudo ser una situación complicada, fue también una demostración de profesionalismo, empatía y trabajo en red.

## Conclusión##: viajar acompañados, siempre

Nos encanta planear viajes soñados. Pero parte de esa planificación responsable implica también estar preparados para los imprevistos. Por eso, *elegí siempre viajar con respaldo profesional y una buena asistencia al viajero*. Esas decisiones, que a veces parecen detalles, son las que marcan la diferencia cuando más lo necesitás.

Floripa me regaló paisajes inolvidables… y también una gran lección: *viajar acompañada es mucho más que no estar sola. Es saber que, pase lo que pase, alguien está ahí.*